Cerdeña, un paraíso en el mediterráneo

Cerdeña es una región perteneciente a la República Italiana. Se encuentra ubicada en la Italia Insular, rodeada por el estrecho de Bonifacio, Córcega, el mar Tirreno y el mar Mediterráneo. Es una de las regiones más extensas del país, por detrás de Sicilia y Piamonte y con tan solo 69 habitantes por kilómetro cuadrado.

Esta alegre región es uno de los destinos preferidos por muchos de los europeos, en ella podremos hacer todo tipo de actividades, ya sean de manera individual o en familia. Hay mar para los más clásicos y amantes del sol o montaña para los más aventureros.

Aunque Cerdeña es prácticamente un sinónimo de playas, una de las joyas arqueológicas de región es la aldea Nurágica de Barumini. Esta singular aldea se encontró en una excavación allá por los años 50. Se cree que es la aldea de la primera civilización nativa que hubo en la isla. La UNESCO la nombró Patrimonio de la Humanidad en 1997, lo que la hizo más popular y uno de los lugares más visitados de la Cerdeña.

Otro lugar arqueológico a tener en cuenta es el yacimiento de Palmavera. Aquí nos encontraremos con un auténtico poblado nuraga, uno de los yacimientos arqueológicos más grandes y antiguos que se conservan en la isla. Podrás encontrar pequeñas edificaciones típicas del desarrollo cultural de los primeros nativos de Cerdeña. Existe hasta un palacio que se deja ver entre medio de unas 50 casas aproximadamente.

Pero para conocer bien la historia de la isla, el lugar que debes visitar sin duda es Tharros, la Ciudad Romana. Es uno de los puntos históricos de la isla mejor conservado. Esta ciudad romana fue fundada por los fenicios en el siglo VIII a.C. aproximadamente y se cree que fue levantada en ese lugar para servir de zona portuaria, ya que es un punto muy estratégico de la isla. Desde aquí no sólo los interesados por la historia antigua podrán disfrutar de sus restos arqueológico, sino también los amantes del sol y la playa podrán gozar de una espectacular panorámica de las playas y sus alrededores.

Playas

Como ya comentábamos, este paraíso enclavado en mitad del Mediterráneo es un gran sinónimo de playa. Hay playas y calas para todos los gustos. Si quieres aguas poco profundas y transparente, tienes la Cala Brandinchi, envuelta por una arena tan suave que parece polvo y resguardada por pinos de color verde saturado bordeando la zona.

Si te interesa practicar buceo o hacer snorkel, la playa Tuerredda es una de las mejores para estas actividades. Se encuentra protegida del oleaje por una bahía que la hace ideal para contemplar el fondo marino con total claridad. Pero tiene una cosa mala: en temporada alta (julio y agosto) la playa se encuentra abarrotada. Aún así, se puede seguir disfrutando perfectamente si la multitud no es un inconveniente para ti.

También existe una playa para los amantes de los deportes acuáticos. La playa della Sperenza es ideal para tomar el sol, pero también para practicar paddle surf, piragüismo, vela o correr un poco con motos acuáticas. Para acceder a esta playa hay que atravesar una larga carretera de curvas, lo que la hace una playa menos transitada y tranquila. No tiene aguas muy profundas, pero son suficientes para sacar pequeñas embarcaciones desde la orilla y bordear las pequeñas calas que limitan la playa.

Si vas con niños y no deseas hacer nada en especial, la playa de Capriccioli es ideal. Es una pequeña pero pintoresca playa con aguas muy poco profundas, ideal para que los niños se remojen con seguridad. Tiene muy poca costa y es fácil cobijarse bajo la sombra y estar cerca de la orilla, ya que a escasos metros de esta se encuentra un pequeño bosque. Como curiosidad, esta playa fue uno de los escenarios para una de las películas de James Bond.

Actividades

Aparte de recorrer las playas de la isla (principal actividad de la mayoría de turistas), puedes realizar otras actividades tan dispares a las anteriores como un taller de quesos sardos. Aunque no lo creas, la cultura gastronómica de Cerdeña es muy admirada por todos los visitantes extranjeros que la visitan, y los quesos son uno de sus productos estrellas. Existe un tour por una de las fabricas de queso más veteranas del país en el que te mostrarán todo el proceso de creación y una pequeña degustación de sus quesos al terminar el recorrido.

Otra de las actividades más demandadas por los visitantes son las visitas guiadas en kayak. Puedes alquilar uno de estos pequeños flotantes y realizar la actividad por tu cuenta, aunque lo más recomendable es hacerlo a través de un tour en grupo, donde podrás contemplar pequeñas joyas en formato de calas escondidas al turismo y solo accesible a través de embarcaciones, o visitar puntos calientes donde existe una amplia fauna marítima lejos de la multitud.

Por último, en la isla existen escuelas hípicas de alto prestigio, algunas son reconocidas a nivel mundial. Es por eso que, en los últimos años, las cabalgatas se están convirtiendo en una actividad bastante popular dentro de la isla. Estos paseos a caballos los podrás realizar por camino de monte o por las playas, siendo esta última una de las preferidas por los usuarios.