El tiempo en Egipto: La mejor época para viajar a Egipto

Es importante elegir la mejor época para viajar a Egipto si quieres disfrutar de todos los atractivos que ofrece el país sin tener que lidiar con temperaturas infernales.

Por eso en este artículo vamos a darte toda la información que necesitas sobre el tiempo en Egipto para que puedas planificar bien ese esperado viaje.

El tiempo en Egipto

Al pensar en el tiempo en Egipto se nos vienen a la mente altas temperaturas y, efectivamente, es lo que vas a encontrarte con bastante probabilidad. Sin embargo, puedes evitar el calor extremo siempre que te ajustes a la mejor época para viajar a Egipto.

El tiempo en Egipto en general, además de caluroso, es muy seco y las lluvias son casi inexistentes en algunas zonas del país. Afortunadamente, las playas de Egipto son espectaculares y en ellas podrás mitigar ese calor dándote un buen baño como, por ejemplo, en las islas Giftun, Sharm el Sheikh y Hurghada. También puedes aprovecharlas contratando un crucero por Egipto.

Una característica particular del tiempo en Egipto es la existencia de tormentas de arena, ocasionadas por el viento conocido como Sirocco.

Las temperaturas en la costa son más suaves que en el interior, donde las diferencias pueden llegar a ser realmente amplias. Mientras que cerca del mar los máximos no superan los 30 grados en el mes más caluroso, en el interior del país pueden llegar a los 50ºC.

¿Cuál es la mejor época para viajar a Egipto?

Teniendo en cuenta que el tiempo en Egipto es tan caluroso que puede llegar a arruinar la experiencia de viaje, puede parecer que la mejor época para viajar a Egipto es durante aquellos meses en los que las temperaturas son más suaves. Esto significa evitar los meses de verano y viajar en otoño e invierno. 

No obstante, partimos de la base de que si tienes intención de viajar a Egipto sabes que vas a pasar calor, con lo cual el clima puede ser un factor a tener en cuenta, pero desde luego no el único. Lee más consejos para viajar a Egipto sobre el clima.

Hay muchas atracciones y festividades que merecen la pena y que no se celebran necesariamente en esas fechas menos calurosas. Lo mejor a la hora de planificar tu viaje es que juegues con las fechas que tienes disponibles y los eventos o atracciones a los que quieras asistir, y que aceptes las altas temperaturas como parte del precio a pagar por visitar un lugar como Egipto.

Además también hay que tener en cuenta que en las fechas menos calurosas, de noviembre a marzo, es cuando mayor afluencia de turistas hay, y eso también es algo a tomar en consideración.

En resumen: si viajas en otoño o invierno encontrarás mejor clima pero mayor masificación. Si viajas en los meses de verano, muy pocos turistas y calor extremo. Y si quieres algo intermedio, abril -mayo y septiembre- octubre pueden darte ese equilibrio.

Principales festividades 

Un viaje a Egipto tiene visitas y actividades obligadas, sea cual sea la fecha en la que visites el país: las pirámides, un crucero por el Nilo, el Museo Egipcio del Cairo…

Pero si además de las clásicas atracciones que ver en Egipto quieres involucrarte más en festividades locales, no está de más que conozcas las fechas de algunos eventos de gran relevancia. Así podrás incluir una visita a alguno de ellos en tu agenda de actividades y tu viaje se saldrá un poco de los tópicos comunmente asociados al país.

Es una forma de conocer no solo la cultura del antiguo Egipto, sino también la realidad actual.

Sham el Nessim

La conmemoración de la llegada de la Primavera es una festividad cuya celebración data de 45 siglos atrás. El Nilo es el punto central de la actividad y hasta el río se acercan miles y miles de personas a degustar productos de temporada y a rendir homenaje a esta fiesta cantando y bailando. Tiene lugar a mediados de abril.

Ramadán

Un mes más tarde se celebra la festividad religiosa por excelencia, el ramadán. Durante ese mes los musulmanes tienen prohibido consumir alimentos durante el día, y por esa razón los restaurantes abren hasta bien entrada la noche y lucen una decoración especial conmemorativa. 

Día del Profeta 

El nacimiento de Mahoma se celebra en todos los países árabes, pero en Egipto tiene especial relevancia. Merece la pena pasear por las calles de El Cairo y ver la decoración de las mezquitas, a los fieles rezando sus oraciones, y la bulliciosa actividad que se genera alrededor de los puestos de comida  y los mercados.

Festival de Música Árabe 

La primera semana de Agosto  tiene lugar este festival que es la máxima expresión cultural de la música árabe. Se celebra en El Cairo  y reúne a artistas y público de lugares muy remotos.

Qué llevar a Egipto en la maleta

Preparar la maleta para tu viaje a Egipto será mucho más fácil si sigues las indicaciones que te damos a continuación:

• Lleva ropa ligera y fresca, pero no necesariamente ha de ser toda de manga corta. En primer lugar porque en Egipto el sol puede llegar a ser abrasador y en ocasiones vas a sentirte mejor vistiendo prendas finas que te liberen de la exposición directa y, en segundo porque, aunque tu apariencia delate que eres turista, lo mejor es no desentonar demasiado con la población local. Y en un país como Egipto, cuanto menos piel enseñes, mucho mejor
• El calzado que necesitas no tiene demasiada complicación. Con unas chanclas o sandalias irás a cualquier parte. Cuanto más frescos lleves los pies, mucho mejor.
• Precisamente porque el sol estará presente en todo momento harás bien en protegerte de él. Crema protectora, gafas de sol y un sombrero para evitar insolaciones deben estar en tu maleta si o si.
• Te recomendamos también que metas un bolso de mano o una mochila para llevar siempre contigo lo imprescindible cuando recorras el país. Comida, agua, alguna prenda para protegerte del aire acondicionado y toda la documentación y requisitos para viajar a Egipto.
• Cargadores y adaptadores siempre son necesarios cuando vas a viajar, así que llévalos contigo por precaución.
• Por último, mete en una bolsa de aseo aquellos medicamentos que creas te pueden ser más necesarios. No necesitas llevar un botiquín de primeros auxilios pero sí tener prevista cualquier eventualidad que pueda afectar a tu salud.